Lactancia -Destete sin contratiempos

Para que tu bebé renuncie a tu pecho tiene que dejarlo de manera progresiva. Así os resultará más fácil a los dos..


Dejar de amamantar tiene que ser una decisión voluntaria que tomes informada y con total libertad las autoridades sanitarias y los médicos recomiendan la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses y como parte de la alimentación hasta los dos años. Pero el tiempo de duración de la lactancia materna lo tenéis que decidir tu hijo y tú.

El secreto:

Son muchos los motivos por los que puedes plantear el destete: tienes que volver al trabajo, estás cansada, crees que ya le has dado el pecho suficiente tiempo, tienes que tomar una medicación incompatible... el secreto para que todo vaya sobre ruedas es que intentes adaptarte a tú debe. Eso significa, principalmente, que le des tiempo para acostumbrarse a una nueva manera de alimentarse.

Es muy distinto:

Si tú bebe aún no ha cumplido los seis meses, el único alimento que sigue necesitando es la leche. Pero el paso de la leche materna, de sabor y composición irrepetible en cada madre, a la leche de fórmula no siempre es fácil. Por una parte su hijo debe acostumbrarse a una manera distinta de obtener el alimento (con lo que le costó aprender a mamar). Por otra, prescindir del pecho materno es para él mucho más que cambiar de leche es un cambio en vuestra relación que le pueda llegar a sorprender.

Cuanto más pausado y gradual será el destete, menos traumático será.

Hazlo despacio. Os interesa a los dos. Para él, porque un destete brusco puede entender lo como un abandono; se ve privado no sólo de su alimento habitual hasta entonces si no también de unos momentos de cercanía y seguridad. Hacer lo gradualmente también es bueno para ti porque al disminuir la succión, la producción de leche va menguando progresivamente y te evitas hinchazones y malestar en los hechos.

Que no coincida con una época de cambios elegir el mejor momento es clave. Ni se te ocurra hacerlo así va a empezar la guardería o está enfermo los cambios acumulados le inquietan.

Adáptate a la edad de tú bebe. No es lo mismo deja de dar el pecho a los cuatro meses, que a los seis meses o a los doce. En el primer caso tendrás que ir sustituyendo las tetadas por tomas de leche adaptada. El segundo, tú bebe podrá ir tomando otros alimentos para ir diversificando su alimentación, y en el tercero tendrás que desplegar tú estrategia para aplazar sus demandas, o lo que es lo mismo, negociar. Necesitará más mínimos. Algunos bebés que se están destetando se muestran inquietos, repentinamente duermen peor o rechazan cosas que hasta entonces gustaba. Procuró compensarlo con un plus de cariño.

Y tú mucha paciencia. Lo importante es que la situación no resulte frustrante para ninguno de los dos. Tómatelo con calma y, como siempre, pide ayuda si crees que la necesita. Aunque dar de mamar sea cosa de dos, dejarlo requiere, como muchas veces sucede con el inicio, el apoyo de terceras personas.


Una ayuda extra.
Que la producción se vaya adecuando a la menor demanda de tú hijo es cuestión de tiempo. Quizás durante un par de días tus pechos acumularan leche, sobre todo a media mañana si no les dan el pecho desde la noche anterior. Para evitar obstrucciones que huelan derivar en mastitis u otras complicaciones, procura y vaciándote un poco el pecho con un sacaleches o manualmente. Saca sólo la cantidad necesaria para dejar de sentir molestias. No las traigas toda porque, aunque descongestionarás el pecho momentáneamente, tu cuerpo generara más para responder la demanda. La leche que queda en el pecho acaba siendo reabsorbida por el propio organismo.





Trucos para superar la crisis:

Hay bebés que se resisten a dejar el pecho. Si eso es lo que os ocurre:

Que se lo de Papa. A ti te asocia con mamar, así que mejor que el biberón se lo dé otra persona de la familia.

Cambia el escenario. Si le sueles dar en pecho en el mismo rincón de siempre elige otro distinto para sus nuevas tomas.

Extráete leche. Si lo que no le gusta es el sabor, ofrecele tú leche en biberón.

Buscar alternativas. Si no hay manera, prueba con una cuchara, una jeringa o una taza con agujeros.

Acerca de un objeto que le tranquilice. Agarrarse a su mantitas, un muñeco o su chupete puede aliviarle la ansiedad.

Las tres reglas de oro:

1. No ofrecer, no rechazar. Se trata de que mame cada vez menos, no de impedírselo por completo.


2. Distraer. Identifica los momentos y circunstancias en los que tu bebe suele pedir el pecho y ofrecerle alternativas. Si no tiene mucho hambre,aceptará.


3. Ceder. Si le cuesta aceptar la leche adaptada, ofrécele el pecho y vuelve a intentarlo en la siguiente toma.

el Parto

El parto,una de las principales preocupaciones de la mujer embarazada, especialmente las inexpertas. Ser madre se aprende con la práctica, prepararse para el parto es una cuestión de informarse para que puedas quedar más tranquila. Las madres primerizas son las que quieren informarse más sobre proceso y las etapas del parto, los cursos de preparación para el parto pueden ayudarle en este sentido. También podrá conocer métodos alternativos de parto, y hablar con su médico acerca del parto que le interese o el que en realidad necesite.

Síntomas:
Cuando:
- Las contracciones se produzcan a cada 5 o 10 minutos.
- Cuando rompa la placenta y salga un líquido de color marrón verdoso oscuro con manchas.
- Sangrado vaginal.
- No puedas caminar ni hablar durante las contracciones.
- Notas algo de dilatación.

Abriendo la puerta al bebé en el parto
El proceso suele durar de 8 a 12 horas. Salvo excepciones o complicaciones. Todo depende del estado de la mamá y del bebé. El parto se inicia con las primeras contracciones provocadas por la reducción del cuello uterino hasta que este desaparezca por completo. Las contracciones suelen ocurrir cada 20 ó 30 minutos, con una duración de 15 a 20 segundos cada una.

Una vez desaparece el cuello del útero, las contracciones aumentan debido a la dilatación progresiva del cuello que debe presentar una apertura máxima de 10 cm para que pueda dar paso al bebé. Hasta que el bebé salga, este proceso suele durar aproximadamente de 6 a 8 horas, depende si es o no el primer parto de la madre.

Las contracciones:
Comenzando el proceso de dilatar el cuello uterino, puede sentir contracciones suaves a cada 10 ó 15 minutos, con una duración media de 20 segundos. En ese momento la abertura de tu útero es de casi dos centímetros. Las contracciones siguen, y se van intensificando. Y suelen obedecer al siguiente ritmo:

- Contracciones a cada 5 minutos, con duración entre 30 y 40 segundos, dilatación de casi 5 cm.
- Contracciones a cada 3 o 4 minutos, con duración de 40 a 45 segundos, dilatación de aproximadamente 6 cm.
- Contracciones a cada 2 o 3 minutos, con duración de 45 a 50 segundos, dilatación de 8 cm.
- Contracciones a cada 1 o 2 minutos, con duración de aproximadamente 1 minuto, dilatación de casi 10 cm. Cuando llegues a esta etapa, tendrás poco tiempo entre una contracción y otra para recomponerte. Puedes sentir una sensación de calor, estiramiento y ardor en la vagina, acompañado de sudoración alrededor de la boca.

Cuando el cuello alcance los 10 cm de dilatación, se inicia el proceso de expulsión del bebé. Las contracciones se alejarán y se presentarán a cada 2 o 3 minutos. Y seguramente el médico te pida para que empuje el bebé. En esta fase, la cabeza del bebé penetra en el canal de parto y va bajando hasta el periné realizando un movimiento de rotación interna.

La expulsión del bebé

Cuando el médico consigue ver 3 o 4 cm de la cabeza al recién nacido, te practicará, si necesario, la episiotomía (corte en la zona del periné a la entrada de la vagina) para facilitar la salida del bebé, y evitar desgarres por el esfuerzo y la presión del bebé. El médico te pedirá que continúes empujando al crío y, una vez que se salga un hombro, luego el otro, el resto del cuerpo se saldrá por sí mismo. Y en este momento sentirás dolores, pero el sentimiento de alivio será intenso y podrás disfrutar de la alegría porque, ¡tu hijo acaba de nacer!

El parto termina con la expulsión de la placenta.

Nombres niño y niña

NOMBRES DE NIÑO EN ESPAÑOL /CASTELLANO

A
AARÓN, ABADÍA, ABDÓN, ABDUL, ABEL, ABELARDO, ABNER, ABRAHAM, ABRIL, ABSALÓN, ACACIO, ADALBERTO, ADALGISO, ADAM, ADÁN, ABELARDO, ADELINO, ADELIZ, ADELMAR, ADELMO, ADELQUI, ADHEMAR, ADOLFO, ADONAI, ADONIS, ADRIÁN, ADRIANO, ADRIEL, AGAMENÓN, AGAPITO, AGENOR, AGESILAO, AGUSTÍN, AITOR, ALADINO, ALAN, ALARICO, ALBANO, ALBERTO, ALBINO, ALCEO, ALCIBÍADES, ALCIDES, ALCUINO, ALDO, ALEJANDRO, ALEJO, ALEX, ALEXANDER, ALEXIS, ALFIO, ALFONSO, ALFREDO, ALÍ, ALTERIO, ALVAR, ALVARO, AMADEO, AMADÍS, AMADO, AMADOR, AMALIO, AMANCIO, AMANDIO, AMANDO, AMARANTO, AMARU, AMBROSIO, AMÉRICO, AMÍLCAR, AMÍN, AMINTOR, ANACLETO, ANASTACIO, ANDREA, ÁNGEL, ÁNIBAL, ANSELMO, ANTONIO, AQUILES, ARCHIBALDO, ARGENTINO, ARGIMIRO, ARIEL, ARISTEO, ARÍSTIDES, ARISTÓBULO, ARISTÓTELES, ARMANDO, ARMENTARIO, ARNALDO, ARNOLDO, ARNULFO, ARQUÍMEDES, ARSENIO, ARTEMIO, ARTURO, ARY, ASAF, ASDRÚBAL, ATAHUALPA, ATANASIO, ATHOS, ATILA, ATILANO, ATILIO, AUGUSTO, AURELIANO, AURELIO, AVELINO, AXEL Y AZUL.


B
BALDOMERO, BALTASAR, BARTOLOMÉ, BELÉN, BELISARIO, BELTRÁN, BEN, BENEDICTO, BENIGNO, BENITO, BENJAMÍN, BERNABÉ, BERNARDINO, BERNARDO, BLAS, BONIFACIO, BORIS, BRAULIO, BRIAN Y BRUNO.


C
CAÍN, CALEB, CALIXTO, CAMILO, CÁNDIDO, CARLOS, CARMELO, CASIMIRO, CAYETANO, CECILIO, CEFERINO, CELESTINO, CELIO, CÉSAR, CHRISTIAN, CICERÓN, CIPRIANO, CIRILO, CIRO, CLAUDIO, CLEMENTE, CONRADO, CONSTANCIO, CONSTANTINO, CORNELIO, COSME, CRISANTO, CRISÓLOGO, CRISTIÁN, CRISTÓBAL, CRUZ Y CUASIMODO.

D
DALMACIO, DALMIRO, DÁMASO, DAMIÁN, DAMOCLES, DAN, DANIEL, DANILO, DANTE, DARDO, DAVID, DELFÍN, DEMETRIO, DEMIÁN, DENIS, DIEGO, DIMITRI, DIÓGENES, DIONISIO, DOMINGO Y DONATO.


E
EDGAR, EDGARDO, EDMUNDO, EDUARDO, EFRAÍN, ELÍAS, ELIO, ELISANDRO, ELISEO, ELMER, ELMO, ELOY, ELPIDIO, ELVIO, EMANUEL, EMILIANO, EMILIO, EMIR, EMMANUEL, ENEAS, ENRICO, ENRIQUE, ENZO, ERIC, ERICO, ERNESTO, ESPARTACO, ESTANISLAO, ESTEBAN, EUGENIO, EULALIO, EUSEBIO, EUSTAQUIO, EVANGELINO, EVARISTO, EXEQUIEL Y EZEQUIEL.


F
FABIÁN, FABIO, FABRICIO, FACUNDO, FAUSTO, FAVIO, FEDERICO, FELICIANO, FELIPE, FÉLIX, FERMÍN, FERNÁN, FERNANDO, FIDEL, FILIBERTO, FLAVIO, FLOREAL, FLORENCIO, FLORIÁN, FORTUNATO, FRANCISCO, FRANCO, FRANK, FROILÁN, FRUCTUOSO, FULGENCIO Y FULVIO.


G
GABINO, GABRIEL, GALILEO, GALO, GASPAR, GASTÓN, GENARO, GERALDO, GERARDO, GERMÁN, GERVASIO, GILBERTO, GODOFREDO, GONZALO, GRACIANO, GREGORIO, GUALBERTO, GUALTERIO, GUIDO, GUILLERMO, GUMERSINDO Y GUSTAVO


H
HAROLDO, HÉCTOR, HERÁCLITO, HERALDO, HÉRCULES, HERIBERTO, HERMÁN, HERMINIO, HERNÁN, HERNANDO, HERODES, HILARIO, HIPÓLITO, HOMERO, HONORIO, HORACIO, HORTENCIO, HUBERTO, HUGO Y HUMBERTO


I
IAN, IGNACIO, IGOR, IÑAKI, IÑIGO, IRINEO, ISAAC, ISAÍAS, ISIDORO, ISIDRO, ISMAEL, ISRAEL, ÍTALO, IVÁN Y IVO


J
JACINTO, JACOB, JACOBO, JACQUES, JAIME, JAIRO, JAVIER, JENARO, JEREMÍAS, JERÓNIMO, JESÚS, JOAQUÍN, JORGE, JOSÉ, JOSUÉ, JUAN, JULIÁN, JULIO, JUSTINIANO, JUSTINO Y JUSTO.


K
KALED Y KALIL.


L
LACOONTE, LADISLAO, LAUREANO, LAUTARO, LÁZARO, LEANDRO, LELIO, LEO, LEÓN, LEONARDO, LEONEL, LEONELO, LEÓNIDAS, LEONIDES, LEOPOLDO, LINDOR, LINO, LISANDRO, LISARDO, LORENZO, LUCAS, LUCIANO, LUCIO, LUCRECIO, LUDOVICO Y LUIS


M
MACIEL, MAHOMA, MAMERTO, MANUEL, MARCELO, MARCIAL, MARCIO, MARCO, MARCOS, MARIANO, MARÍN, MARINO, MARIO, MARTÍN, MARTINIANO, MARTINO, MATEO, MATÍAS, MATUSALÉN , MAURICIO, MAURO, MAX, MAXIMIANO, MAXIMILIANO, MÁXIMO, MELCHOR, MICAEL, MICHEL, MIDAS, MOHAMED, MOISÉS, MUNIR Y MUSTAFÁ.


N
NAHUEL, NAIM, NAPOLEÓN, NARCISO, NATAL, NATALIO, NATÁN, NATANAEL, NATANIEL, NAZARENO, NAZARET, NELSON, NEMESIO, NEPOMUCENO, NEPTUNO, NEREO, NERI, NERÓN, NÉSTOR, NICANDRO, NICANOR, NICASIO, NICODEMO, NICOLÁS, NICOMEDES, NINO, NOÉ, NOEL, NORBERTO, NORMAN Y NORMANDO.

O
OCTAVIO, OLEGARIO, OLINDO, OLIVERIO, OMAR, ONÉSIMO, ONOFRE, ORÁNGEL, ORESTES, ORFEO, ORLANDO, OROSCO, OSCAR, OSIRIS, OSMÁN, OSMAR, OSMARO, OSVALDO, OTELO, OTTO, OVIDIO Y OWEN.


P
PABLO, PANCRACIO, PÁNFILO, PANTALEÓN, PAOLO, PASCUAL, PASTOR, PATRICIO, PAUL, PAULINO, PAULO, PAZ, PEDRO, PEHUEN, PELAGIO, PERCIVAL, PERICLES, PETRONIO, PÍO, PITÁGORAS, PLÁCIDO, PLATÓN, PRÓSPERO, PRUDENCIO, PUBLIO Y PUDENCIANO.


Q
QUERUBÍN, QUILLÉN, QUIMEY Y QUINTO.


R
RAFAEL, RAIMUNDO, RAINERO, RAMIRO, RAMÓN, RAMSÉS, RANDOLFO, RAÚL, RAULINO, REGINALDO, REINALDO, REMIGIO, RENALDO, RENATO, RENÉ, RENZO, REYNALDO, RICARDO, RIGOBERTO, RINALDO, ROBERTINO, ROBERTO, ROBINSON, ROBUSTIANO, RODOLFO, RODRIGO, ROGELIO, ROGER, ROLANDO, ROMÁN, ROMEO, ROMILDO, ROMUALDO, RÓMULO, ROSENDO, ROY, RUBÉN, RUDECINDO, RUFINO, RUFO, RUPERTO Y RUY.


S
SABINO, SACHA, SADOC, SALOMÓN, SALVADOR, SALVIANO, SALVINO, SALVO, SAMUEL, SANCHO, SANDRO, SANSÓN, SANTIAGO, SANTINO, SANTO, SANTOS, SATURNINO, SAÚL, SAULO, SAVERIO, SEBASTIÁN, SEGISMUNDO, SEGUNDO, SEPTIMIO, SERAFÍN, SERGIO, SETH, SEVERINO, SEVERO, SIGFRIDO, SILO, SILVANO, SILVERIO, SILVESTRE, SILVINO, SILVIO, SIMEÓN, SIMÓN, SIXTO, SÓCRATES, SÓFOCLES, SOL, SOLANO Y
STEFANO.


T
TADEO, TANCREDO, TEODORO, TEODOSIO, TEÓFILO, THIERRY, TIAGO, TIBERIO, TIBURCIO, TICIANO, TIMOTEO, TITO, TOBÍAS, TOMÁS, TOMÉ, TORCUATO, TORIBIO, TRISTÁN, TROILO Y TÚPAC.


U
UBALDO, ULISES, URBANO, URIEL, URSO Y UZIEL.


V
VALDEMAR, VALENTÍN, VALENTINO, VALERIANO, VALERIO, VENANCIO, VICENTE, VÍCTOR, VICTORIANO, VICTORINO, VIRGILIO, VITO, VIVIANO, VLADIMIR Y VLADIMIRO.


W
WALBERTO, WALDO, WALTER, WASHINGTON, WENCESLAO, WILFREDO, WILLIAM Y WILSON.


X
XAVIER


Y
YAGO


Z
ZACARÍAS, ZENÓN Y ZOILO
.
.
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.
.



.
.
.
NOMBRES DE NIÑA EN ESPAÑOL /CASTELLANO
NAMES OF GIRL IN SPANISH / CASTILIAN

A
ABIGAIL, ABRIL, ADA, ADELA, ADELAIDA, ADELIA, ADELINA, ADORACIÓN, ADRIANA, ÁGATA, AGOSTINA, ÁGUEDA, AGUSTINA, AÍDA, AILÉN, AILÍN, AIMÉ, ALBA, ALBANA, ALBERTINA, ALBINA, ALCIRA, ALDANA, ALEJANDRA, ALEJANDRINA, ALEXANDRA, ALEXIA, ALFONSINA, ALICIA, ALINA, ALMA, AMALIA, AMANCAY, AMANDA, AMAPOLA, AMBROSIA, AMELIA, AMÉRICA, AMIRA, AMPARO, ANA, ANABEL, ANAHÍ, ANALÍA, ANASTASIA, ANDREA, ÁNGELA, ÁNGELES, ANGÉLICA, ANGELINA, ANTONELLA, ANTONIA, ANTONIETA, ANTONINA, ANUNCIACIÓN, ARACELI, ARANZAZU, ARCADIA, ARCELIA, ARGENTINA, ARIADNA, ARIANA, ARIELA, ARMANDA, ARMINDA, ASTRID, ASUNCIÓN, ASUNTA, AURELIA, AURORA, AYELÉN, AYMARÁ, AZUCENA Y AZUL


B
BALBINA, BÁRBARA, BEATRIZ, BEGONIA, BELÉN, BELINDA, BELISA, BELLA, BENEDICTA, BENIGNA, BENILDA, BENILDE, BENITA, BERENICE, BERNADETTE, BERNARDA, BERNARDITA, BERTA, BETANIA, BETIANA, BETTINA, BIANCA, BIBIANA, BLANCA, BRENDA, BRÍGIDA, BRUNA Y BRUNILDA.

C
CALÍOPE, CAMELIA, CAMILA, CANDELA, CANDELARIA, CÁNDIDA,
CANELA, CARIDAD, CARINA, CARLA, CARLINA, CARLOTA, CARMELA, CARMEN, CARMIÑA, CAROL, CAROLA, CAROLINA, CASANDRA, CASIANA, CASILDA, CATALINA, CATERINA, CAYETANA, CECILIA, CELESTE, CELESTINA, CELIA, CELINA, CELINDA, CELMIRA, CIELO, CINTHIA, CINTHYA, CINTIA, CIRILA, CLARA, CLARISA, CLAUDIA, CLAUDINA, CLELIA, CLEMENCIA, CLEMENTINA, CLEOPATRA, CLOE, CLORINDA, CLOTILDE, CONCEPCIÓN, CONSTANCIA, CONSTANZA, CONSUELO, CORA, CORDELIA, CORINA, CORNELIA, CRISTELA, CRISTINA, CRUZ, CYNTHIA Y CYNTIA.

D
DAFNE, DAIANA, DALMA, DALMACIA, DALMIRA, DAMASIA, DAMIANA, DANA, DANIELA, DANILA, DARÍA, DÉBORA, DÉBORAH, DEBRA, DELFINA, DELIA, DENISE, DEOLINDA, DESDÉMONA, DESIRÉE, DIANA, DINA, DINORA, DINORAH, DIONISIA, DIVINA, DOLORES, DOMICIANA, DOMINGA, DOMINICA, DOMINIQUE, DOMITILA, DORA, DORIS, DOROTEA, DULCE Y DULCINEA

E
EDDA, EDELIA, EDELMIRA, EDGARDA, EDILIA, EDIT, EDITA, EDITH, EDNA, EDUARDA, EDUVIGIS, ELADIA, ELBA, ELCIRA, ELDA, ELENA, ELEODORA, ELEONOR, ELEONORA, ELIA, ELIANA, ELIANE, ÉLIDA, ÉLIDE, ELINA, ELISA, ELISABET, ELISEA, ELIZABETH, ELMA, ELODIA, ELOÍSA, ELPIDIA, ELSA, ELVIA, ELVINA, ELVIRA, EMA, EMELINA, EMILIA, EMMA, ENCARNACIÓN, ENRICA, ENRIQUETA, ERCILIA, ERICA, ERLINDA, ERMELINDA, ERNESTINA, ESMERALDA, ESPERANZA, ESTEFANÍA, ESTELA, ESTER, ESTHER, ESTRELLA, ETEL, ETELINDA, ETELVINA, ETHEL, EUGENIA, EULALIA, EULOGIA, EUSEBIA, EVA, EVANGELINA, EVELIA, EVELINA, EVELINA Y EVELYN


F
FABIA, FABIANA, FABIOLA, FANNY, FÁTIMA, FEDERICA, FEDORA, FELICIA, FELICITAS, FELISA, FERNANDA, FINA, FIORELLA, FLAVIA, FLAVIANA, FLOR, FLORA, FLORENCIA, FLORINDA, FORTUNA, FORTUNATA, FRANCA, FRANCISCA, FRIDA Y FULVIA.


G
GABINA, GABRIELA, GALA, GALIA, GENOVEVA, GEORGIA, GEORGINA, GERALDINA, GERALDINE, GERTRUDIS, GILBERTA, GILDA, GIMENA, GINA, GISELA, GISELDA, GISELLE, GLADIS, GLADYS, GLENDA, GLORIA, GRACIA, GRACIANA, GRACIELA, GRETA, GRETEL, GRISEL, GRISELDA, GUADALUPE Y
GUILLERMINA.


H
HAYDÉ, HEBE, HEDA, HEIDI, HELDA, HELENA, HELGA, HELIANA, HELOÍSA, HERMELINDA, HERMILDA, HERMINDA, HERSILIA, HILARIA, HILDA Y HORTENSIA.


I
IANINA, IARA, IGNACIA, ILDEGUNDA, ILEANA, ILIANA, IMELDA, INÉS, INGRID, INMACULADA, IRENE, IRINA, IRIS, IRMA, ISABEL, ISABELA, ISADORA, ISAURA, ISELDA, ISIDORA, ISIS, ISMELDA, ISOLDA, ISOLINA, ITATÍ, ITTAY, IVANA, IVANNA, IVON Y IVONNE.


J
JACARANDA, JACINTA, JACQUELINE, JAEL, JAMILA, JAQUELINA, JAVIERA, JAZMÍN, JEANNETTE, JENARA, JENNIFER, JERUSALÉN, JÉSICA, JESUSA, JEZABEL, JIMENA, JOANA, JOHANNA, JORGELINA, JOSEFA, JOSEFINA, JOVITA, JUANA, JUDITH, JULIA, JULIANA, JUNO, JUSTA Y JUSTINA.


K
KAREN, KARIN, KARINA Y KEILA.


L
LAILA, LARA, LARISA, LAURA, LAUREANA, LAURENCIA, LEANDRA, LEDA, LEILA, LELIA, LENA, LEONARDA, LEONELA, LEONILDA, LEONOR, LEONORA, LETICIA, LÍA, LIBERATA, LIBERTAD, LIBIA, LIDIA, LILA, LILIA, LILIAN, LILIANA, LINA, LINDA, LIS, LISA, LIVIA, LIZA, LOLA, LORELEY, LORENA, LORENZA, LORETA, LORETO, LOURDES, LUCERO, LUCÍA, LUCIANA, LUCILA, LUCINA, LUCRECIA, LUCY, LUDMILA, LUDOVICA, LUISA, LUISINA, LUJÁN, LUPE, LUZ Y LYDIA


M
MABEL, MACARENA, MAFALDA, MAGALÍ, MAGDALENA, MAIA, MAIDA, MAILENA, MAIRA, MAITE, MALEN, MALENA, MALISA, MALVINA, MANUELA, MARA, MARCELA, MARCELINA, MARCIA, MARGARITA, MARÍA, MARIAN, MARIANA, MARIANELA, MARIÁNGELES, MARIBEL, MARICRUZ, MARILINA, MARILÚ, MARINA, MARINE, MARION, MARISA, MARISABEL, MARISOL, MARLENE, MARTA, MARTHA, MARTINA, MARYSOL, MATILDE, MAURA, MÁXIMA, MAXIMILIANA, MAYA, MELANIA, MELANIE, MELINDA, MELISA, MERCEDES, MICAELA, MICHELLE, MILAGROS, MILENA, MINERVA, MIRANDA, MIRELLA, MIREYA, MIRIAM, MIRNA, MIRTA, MIRTHA, MODESTA, MOIRA, MÓNICA, MONSERRAT, MORGANA, MURIEL, MYRIAM Y MYRNA.


N
NADIA, NADINA, NAHIR, NANA, NANCY, NAOMI, NARCISA, NATACHA, NATALÍ, NATALIA, NATASHA, NATIVIDAD, NAZARENA, NAZARET, NEFTALÍ, NÉLIDA, NELLY, NEMESIA, NEREA, NERINA, NICOLE, NIDIA, NIEVES, NILDA, NIMIA, NINA, NOEL, NOELIA, NORA, NORBERTA, NORMA, NURIA, NURIYA Y NYDIA.


O
OBDULIA, OCTAVIA, ODA, ODILA, ODILIA, OFELIA, OLGA, OLIMPIA, OLINDA, OLIVIA, ONDINA, ORFILIA, ORIA, ORIANA, ORNELLA, OTILIA Y OVIDIA.


P
PALMIRA, PALOMA, PAMELA, PANCRACIA, PANDORA, PÁNFILA, PAOLA, PASTORA, PATRICIA, PAULA, PAULINA, PAZ, PELAGIA, PENÉLOPE, PERLA, PETRA, PETRONA, PÍA, PIEDAD, PILAR, PILMAYQUÉN, POPEA, PORCIA, PRECIOSA, PRIMAVERA, PRIMITIVA, PRISCA, PRISCILA, PROSERPINA, PRUDENCIA, PURA Y PURIFICACIÓN.


Q
QUERINA, QUERUBINA, QUILLÉN, QUIONIA, QUIRINA Y QUITERIA.


R
RAFAELA, RAMONA, RAQUEL, RAYÉN, REBECA, REGINA, REMEDIOS, RENATA, RENÉE, RICARDA, RINA, RITA, ROBERTA, ROCÍO, ROMANA, ROMILDA, ROMINA, ROSA, ROSADELIMA, ROSALBA, ROSALÍA, ROSAMUNDA, ROSANA, ROSARIO, ROSAURA, ROSENDA, ROSICLER, ROSINA, ROXANA, RUBINA, RUT Y RUTH.


S
SABA, SABINA, SABRINA, SALOMÉ, SALVADORA, SALVINA, SANDRA, SANTINA, SANTOS, SARA, SEBASTIANA, SÉFORA, SEGISMUNDA, SEGUNDA, SELENE, SELMA, SELVA, SEMÍRAMIS, SERAFINA, SERENA, SERGIA, SERVANDA, SHARON, SHEILA, SIBILA, SIGLINDA, SIGRID, SILVANA, SILVIA, SILVINA, SIMONA, SINFOROSA, SIÓN, SIRA, SIRIA, SOCORRO, SOFÍA, SOL, SOLANA, SOLANGE, SOLEDAD, SONIA, SORAYA, STEFANÍA, STELLAMARIS, STEPHANIE, SULTANA, SUSANA Y SUYAY.


T
TALIA, TAMARA, TANIA, TATIANA, TEA, TELMA, TEODELINA, TEODOLINA, TEODOLINDA, TEODORA, TEODOSIA, TEODOTA, TEOFANÍA, TEOLINDA, TEPSÍCORE, TERESA, TERESITA, TESIRA, TETIS, THELMA, TICIANA, TOMASA, TOSCANA, TRÁNSITO, TRINIDAD, TRISTANA, TROYA, TULIA Y TURQUESA.


U
UMBELINA, URANIA, URIEL, ÚRSULA Y URSULINA.


V
VALENTINA, VALERIA, VALQUIRIA, VANDA, VANESA, VANINA, VELIA, VENUS, VERA, VERNA, VERÓNICA, VESTA, VICENTA, VICTORIA, VILMA, VIOLETA, VIRGINIA, VIVIAN, VIVIANA Y VIVINA.


W
WALBERTO, WALDO, WALTER, WASHINGTON, WENCESLAO, WILFREDO, WILLIAM Y WILSON.


X
XAVIER


Y
YAEL, YANET, YANINA, YARA, YASMIN, YOLANDA, YONE Y YVONNE.


Z
ZAHIRA, ZAIDA, ZARINA, ZELMA, ZELMIRA, ZOÉ, ZOILA, ZORAIDA, ZULEICA, ZULEMA, ZULIMA, ZULMA Y ZULMARA.

Sueño y descanso durante el embarazo

Sueño

Es importante que duerma suficiente durante el embarazo. Su cuerpo está trabajando muy duro para acoger en su interior una nueva vida, de modo que se sentirá más cansada de lo habitual. Y, a medida que vaya creciendo el bebé, le costará cada vez más encontrar una postura cómoda para dormir.

Probablemente la postura que le resultará más cómoda a medida que vaya avanzando el embarazo será estirada sobre un costado con las rodillas flexionadas. Además esta postura facilita la función cardíaca, porque impide que el peso del bebé comprima las grandes venas y arterias que transportan sangre entre el corazón y las extremidades inferiores. Estirarse sobre un costado también ayuda a prevenir las varices, el estreñimiento, las hemorroides y las piernas hinchadas.

Algunos médicos recomiendan a las mujeres embarazadas dormir específicamente sobre el costado izquierdo. Puesto que una de las grandes venas pasa por la parte derecha del abdomen, estirarse sobre el costado izquierdo impide que el peso del útero la presione. Esta postura también optimiza el flujo sanguíneo hacia la placenta y, por tanto, la cantidad de oxigeno que le llega al bebé.

Pregúntele al profesional de la salud que supervise su embarazo qué postura de descanso recomienda. En la mayoría de los casos, descansar sobre cualquiera de los dos costados va bien y permite liberar a la espalda de parte del peso que tiene que cargar durante el día. Para estar más cómoda, póngase cojines entre las piernas, detrás de la espalda y debajo del vientre.

Ejercicio embarazadas

Ejercicio

El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. (DHHS, por sus siglas en inglés) recomienda por lo menos 150 minutos (es decir, dos horas y media) a la semana de actividad aeróbica de intensidad moderada a aquellas mujeres que no sean muy activas de por sí ni realicen actividades vigorosas. Si usted es muy activa o está acostumbrada a realizar actividades aeróbicas de intensidad elevada, tal vez pueda continuar con los entrenamientos, siempre y cuando su médico lo considere seguro. No obstante, antes de iniciar o continuar con cualquier programa de ejercicio físico, hable primero con su médico.

Está demostrado que hacer ejercicio durante el embarazo es sumamente beneficioso. El ejercicio regular puede ayudar a:

* impedir una ganancia de peso excesiva
* reducir los problemas asociados al embarazo, como el dolor de espalda, las piernas hinchadas y el estreñimiento
* dormir mejor
* aumentar la energía
* mejorar el aspecto físico
* prepararse para el parto
* reducir el tiempo de recuperación posparto

Las actividades de bajo impacto y moderada intensidad (como andar o nadar) son magníficas elecciones. El yoga o el método Pilates, así como los DVD o vídeos de gimnasia suave para embarazadas también son buenas opciones. Son actividades de bajo impacto y trabajan tanto la fuerza como la flexibilidad y la relajación.

Pero debería limitar el ejercicio aeróbico de gran impacto y evitar los deportes o actividades que conllevan un riesgo de caídas y/o de lesiones abdominales. Entre las actividades prohibidas durante el embarazo se incluyen los deportes de contacto, el esquí alpino y la equitación.

También es importante que sea consciente de los cambios que se están produciendo en su cuerpo. Durante el embarazo, su cuerpo produce una hormona denominada relaxina, que se cree que ayuda a preparar el área pubiana y el cuello uterino para el parto. Esta hormona afloja los ligamentos, lo que puede provocarle cierta pérdida de estabilidad y hacerle más proclive a las lesiones.

Por eso es más fácil que se haga torceduras o distensiones, sobre todo en lo que se refiere a las articulaciones de la pelvis, las lumbares y las rodillas. Además, su centro de gravedad cambiará conforme vaya avanzando el embarazo, lo que le hará perder más fácilmente el equilibrio e incrementará el riesgo de caídas. Tenga esto en cuenta a la hora de elegir una actividad física, y no se exceda.

Independientemente del tipo de ejercicio que elija, haga descansos frecuentemente y recuerde beber abundante líquido. Y déjese guiar por el sentido común: si nota que le falta el aliento, se empieza a encontrar mal o tiene alguna molestia, baje el ritmo o interrumpa la actividad. Si tiene alguna duda sobre la práctica de determinada actividad o deporte durante el embarazo, consulte a su médico para que le dé recomendaciones específicas al respecto.

Cuidado de la salud durante el embarazo (Nutrición)

Nutrición y suplementos

Ahora que usted está comiendo para dos (¡o más!), no es el mejor momento para escatimar calorías o ponerse a dieta. De hecho, ocurre justamente lo contrario -necesita aproximadamente 300 calorías diarias más, sobre todo cuando el embarazo esté bastante avanzado y el bebé crezca más deprisa. Si usted está muy delgada, es muy activa o espera gemelos, necesitará ingerir todavía más calorías. Pero, si tiene sobrepeso, es posible que su médico le recomiende no aumentar tanto la ingesta de calorías.

Comer de forma saludable siempre es importante y especialmente durante el embarazo. Por lo tanto, asegúrese de que las calorías que ingiere proceden de alimentos nutritivos que contribuirán al crecimiento y desarrollo del bebé.

Intente seguir una dieta equilibrada que incorpore los siguientes alimentos:
carne magra
fruta
verdura
pan integral
productos lácteos de bajo contenido en grasas

Si sigue una dieta saludable y equilibrada, tendrá más probabilidades de obtener los nutrientes que necesita. Pero necesitará más nutrientes esenciales (sobre todo calcio, hierro y ácido fólico) que antes de quedarse embarazada. El profesional de la salud que supervise su embarazo le recetará vitaminas prenatales para estar seguro de que tanto usted como su bebé en proceso de crecimiento se están alimentando bien.



De todos modos, el hecho de tomar vitaminas prenatales no significa que usted pueda seguir una dieta desequilibrada. Es importante que recuerde que debe alimentarse bien durante el embarazo. Las vitaminas prenatales son suplementos para completar la dieta, no la única fuente de esos nutrientes tan necesarios.

Calcio

La mayoría de mujeres de diecinueve años en adelante -incluyendo las que están embarazadas- no suelen ingerir diariamente los 1.000 mg de calcio recomendados. Debido a que los requerimientos de calcio de un bebé en proceso de crecimiento son altos, usted debería aumentar el aporte de calcio para impedir que se le descalcifiquen los huesos. Probablemente el suplemento vitamínico prenatal que le recete el médico contendrá calcio.

Entre las fuentes ricas en calcio se incluyen:

* los productos lácteos bajos en grasas, incluyendo la leche, el queso pasterizado y el yogur
* los productos enriquecidos con calcio, como muchos los zumos de naranja comercializados, la leche de soja y los cereales
* las verduras de hoja verde oscuro, como las espinacas, la col rizada y el brócoli
* el tofu
* las judías secas
* las almendras

Hierro

Las mujeres embarazadas necesitan ingerir aproximadamente 30 mg de hierro cada día. ¿Por qué? Porque el hierro es necesario para fabricar hemoglobina, el componente de los glóbulos rojos encargado de transportar oxígeno. Los glóbulos rojos circulan por el cuerpo para transportar oxígeno a todas las células.

Si una persona no tiene suficiente hierro, su cuerpo no podrá fabricar suficientes glóbulos rojos y sus tejidos y órganos no recibirán el oxígeno que necesitan para funcionar correctamente. Por eso es especialmente importante que las mujeres embarazadas ingieran suficiente hierro a través de la dieta, tanto para su salud como para la de sus bebés es proceso de desarrollo.

A pesar de que este nutriente se puede encontrar en distintos tipos de alimentos, el hierro procedente de la carne se absorbe más fácilmente que el de origen vegetal. Entre los alimentos ricos en hierro se incluyen:

* la carne roja
* la volatería de carne oscura
* el salmón
* los huevos
* el tofu
* los cereales enriquecidos con hierro
* las judías secas y los guisantes
* las frutas deshidratadas
* las verduras de hoja verde oscuro
* la melaza negra

Ácido fólico

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan que todas las mujeres en edad de procrear -y sobre todo aquellas que quieran quedarse embarazadas- tomen un suplemento de 400 microgramos (0,4 mg) de ácido fólico cada día, aparte del ácido fólico ingerido a través de la dieta. Puede formar parte del suplemento multivitamínico prenatal o bien tomarse aparte

¿Por qué es tan importante el ácido fólico? Los estudios han mostrado que tomar suplementos de ácido fólico un mes antes de la concepción y durante los tres primeros meses de embarazo reduce en hasta el 70% el riesgo de que el bebé nazca con un defecto del tubo neural.

El tubo neural -que se forma durante las primeras semanas de embarazo, posiblemente antes de que una mujer sepa siquiera que está embarazada- acaba dando lugar al cerebro y la columna vertebral del bebé. Cuando el tubo neural no se forma o cierra correctamente, el resultado es un defecto del tubo neural, como la espina bífida.

De nuevo, el profesional de la salud que supervise su embarazo le recetará un suplemento multivitamínico prenatal que contenga la cantidad adecuada de ácido fólico. Algunos profesionales de la salud recomiendan incrementar todavía más el aporte de ácido fólico, especialmente en aquellas mujeres que han tenido previamente un hijo con un defecto del tubo neural.

Si usted adquiere un suplemento multivitamínico de venta sin receta médica, deberá tener en cuenta que, aunque la mayoría de ellos contienen ácido fólico, no todos contienen la cantidad adecuada para cubrir las necesidades nutricionales de una mujer embarazada. De modo que lea atentamente los prospectos de los distintos suplementos y pida consejo a su médico antes de adquirir uno.
Fluidos

También es importante beber abundante líquido, sobre todo agua, durante el embarazo. El volumen sanguíneo de una mujer aumenta espectacularmente durante el embarazo, y beber suficiente agua cada día puede ayudarle a evitar problemas bastante habituales durante el embarazo, como la deshidratación y el estreñimiento.

Salud durante el embarazo

Ahora que está embarazada es más importante que nunca que se cuide. Por descontado, todo el mundo -su médico, sus familiares, sus amigos, sus compañeros de trabajo e incluso totales desconocidos- le darán consejos sobre lo que debería y no debería hacer durante el embarazo.

Pero mantenerse sana durante el embarazo solamente depende de usted, de modo que es fundamental que se informe bien sobre las muchas formas de cuidar de su salud y de la salud de su bebé durante el embarazo.
Examenes médicos

La clave para proteger la salud de su bebé está en hacerse examenes médicos prenatales regularmente. Si cree que puede estar embarazada, concierte una cita con el profesional de la salud que desea supervise su embarazo. Debería hacerse la primera revisión en cuanto crea que puede haberse quedado embarazada.

En el primer examen prenatal, el profesional de la salud que usted haya elegido probablemente le hará una prueba del embarazo y estimará de cuántas semanas está basándose en la exploración física y la fecha de su última menstruación. Utilizará esta información para predecir la fecha aproximada del parto (de todos modos, la ecografía que le harán cuando el embarazo esté más avanzado ayudará a corroborar esa fecha).

Si usted está sana y no hay ningún factor de riesgo que pueda complicar el embarazo, probablemente bastará con que se haga examenes prenatales:
cada cuatro semanas hasta la 28ª semana de embarazo
a partir de entonces, cada dos semanas hasta la 36ª semana de embarazo
y luego una vez por semana hasta el parto

A lo largo del embarazo, el profesional de la salud que supervise su embarazo la pesará y le tomará la tensión arterial al tiempo que evalúa el crecimiento y el desarrollo del bebé (palpándole el abdomen, midiéndole el vientre y escuchando el latido cardíaco del feto a partir del segundo trimestre de embarazo). A lo largo del embarazo, también le practicarán varias pruebas de diagnóstico prenatal, incluyendo análisis de sangre y de orina, exploraciones del cuello uterino y probablemente por lo menos una ecografía.

Si usted todavía no ha elegido un profesional de la salud para asesorarle y tratarle durante el embarazo, puede optar entre varias alternativas posibles:
Obstetras / ginecólogos (médicos especializados en el embarazo y el parto, aparte de en el apartado reproductor femenino y la salud de la mujer en general).
Médicos de familia (médicos que ofrecen una amplia gama de servicios a pacientes de todas las edades -a veces incluyendo la obstetricia).
Enfermeras-comadronas tituladas (enfermeras especializadas en las necesidades sanitarias de las mujeres embarazadas, incluyendo los cuidados prenatales y la atención durante el parto y el alumbramiento, así como los cuidados posparto en los embarazos sin complicaciones). También hay otros tipos de comadronas, pero usted siempre debería elegir una que pueda acreditar su formación y que esté especializada en este campo.

Cualquiera de estas opciones puede ser una buena elección si usted está sana y no hay ningún motivo para anticipar posibles complicaciones durante el embarazo. No obstante, las enfermeras-comadronas han de tener la posibilidad de acceder a un médico en el caso de que surjan problemas inesperados durante el parto o de que deba practicarse una cesárea.